18 ene 2014

Mermeladas para mi amigo invisible "HAND-MADE"


No sé a cuál de mis amigos se le ocurrió la idea de hacer un amigo invisible tipo "hand-made", es decir, hecho por nosotros mismos, pero lo cierto es que me vino como anillo al dedo. Al final, y para poder facilitar las cosas a los que se declaraban rotundamente "no manitas", añadimos además la posibilidad de que fuera "low cost", limitando la cantidad a gastar a un precio lo bastante asequible. De esta forma, inauguramos el primer amigo invisible "hand-made-low-cost" de la historia de nuestra pandilla. Y fue ¡genial!

Yo me decidí por unas mermeladas caseras, acompañadas de unas galletitas, que quedaron de lo más monas y apetecibles. Lo fácil hubiera sido preparar cupcakes, pero eso no habría sido ninguna sorpresa. Opté por las mermeladas, algo que parecía bastante fácil y, aunque en realidad lo es, me dieron un poco de "guerra" en lo que se refiere al espesor de la confitura. Me quedaban muy líquidas... Y me negaba a añadirles nada (-gelatina neutra es lo que se usa habitualmente-) para espesarlas. Otro de los problemas fue la escasa variedad de frutas que hay ahora en invierno. La de fresas estuvo clara desde el principio. Los otros dos sabores fueron naranja y manzana a la canela.


Para hacer la de naranja tuve especial cuidado en quitar toda la parte blanca de la fruta, para que no quedase amarga, que es algo que no me gusta nada de nada. Recuerdo que, cuando estuve en Inglaterra, cada día nos ponían para desayunar una mermelada de naranja muy dulce, sin ese toque amargo tan desagradable para mí. Siempre la he intentado comprar en España, pero ahora ya sé que la puedo hacer yo misma en casa. Y está... ¡riquíííííííííísimaaaa!


Me apañé unos botecitos especiales de conservas, los esterilicé junto a las tapas hirviéndolos y los sequé en el horno para que no quedase humedad. Una vez hechas las mermeladas, los cerré al vacío, metiendo los botes en una olla grande, cerrados y boca arriba, cubiertos totalmente de agua (ésta debe sobrepasar los botes unos 5 cm.), y los tuve hirviendo unos 30 min. Luego los coloqué boca abajo y los dejé enfriar toda la noche. Terminado este proceso, la conserva en cuestión puede aguantar ¡hasta 9 meses!


Hice las mermeladas con la Thermomix de mi madre, después de varios intentos fallidos al modo tradicional. Las recetas las podéis consultar en estos enlaces:


Creo que me quedó un regalo de lo más coqueto y os lo recomiendo para cualquier ocasión en que queráis sorprender a alguien con algo hecho en casa, pero con un aspecto muy cuidado. Colocad los botes en una caja bonita, decoradlos con tapas de papel o tela, etiquetas identificativas, cuidad la presentación armonizando colores y estilos. Podéis inspiraros viendo fotos en Pinterest, como éstas:


Así que ya sabéis, tomad nota y acordaos de este post cuando queráis hacer un regalito mono y 100% hand-made.

¡Ah! Casi se me olvida. Esto fue lo que recibí yo de mi amigo invisible pandillero. Hecho a mano pieza a pieza. Un puzzle con la foto de mis niños. Presentado en una cajita preciosa. Me encantó. ¿No es chulísimo? By the wonderful Sergio, of course! 



Besos a todos.

¡Hasta pronto!

3 comentarios:

  1. Me encantan las mermeladas caseritas y estas tienen muy buena pinta. Un besazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias por comentar, Nati. La verdad es que han quedado muy ricas. Sobre todo, la de naranja. ¡Deliciosa! Un beso.

      Eliminar
  2. Yo y las mermeladas... Omg, noto que me estoy haciendo mayor poco a poco porque empiezan a gustarme cosas que antes ni en pintura, una de ellas las mermeladas (pero por ahora sólo de frutos rojos). De todos modos ya he tomado nota de los enlaces en los que encontrar las recetas! (:
    Y ahora comentarte que te he nominado a un premio y que si te apetece participar en él, no dudes en echar un vistazo a mi Blog y ver de qué va!

    ¡Saludos! ;)

    ResponderEliminar

Gracias por leerme y visitar mi blog. Me encantaría que me dejaras un comentario, ¿te animas?